En la actualidad, la falta de ensayos que permiten una apropiada evaluación del efecto de los fílleres en el sistema fíller-betún o mástico bituminoso da lugar a que el polvo mineral en la mezcla asfáltica no sea empleado de forma óptima. Este hecho se debe a que en la selección y dosificación del fíller sólo se contempla su grado de finura y la plasticidad asociada a esta variable. Además, en la legislación actual en materia de carreteras (Orden FOM 891/04) se formulan unas dosificaciones fíller/betún basadas en criterios ponderales, sin considerar, en ningún caso, propiedades del fíller que permiten valorar de una forma más adecuada la demanda óptima de ligante bituminoso por parte del fíller para maximizar las propiedades de cohesión y adhesividad del mástico en la mezcla bituminosa.