Una de las amenazas a la calidad de los RRHH es la presencia de múltiples estresores, entre ellos que cabe destacar a los denominados contaminantes emergentes. Con el nombre de contaminantes o compuestos emergentes se define a una serie de compuestos químicos de origen diverso (fármacos, productos de diagnóstico, plaguicidas, detergentes, productos de uso personal, etc.) caracterizados por su continua y creciente producción y consumo. La información existente sobre su presencia en las aguas subterráneas no es abundante, sin embargo, fármacos como el ibuprofeno, cafeína, productos de diagnóstico RX, detergentes (LAS), retardantes de llama, drogas sociales, etc. (¿/l, ng/l) han sido detectados en acuíferos. Su presencia en el medio hídrico no es reciente, pero su distribución espacial, presencia, rutas de incorporación al medio y persistencia en el mismo todavía no son del todo conocidos, al igual que sus efectos sobre la salud humana y ecosistemas. Pueden ser nocivos, especialmente por la presencia generalizada de algunos compuestos y los limitados conocimientos sobre su toxicidad. La ausencia de normativa aplicable, a excepción de la primera lista de observación adoptada en 2015 (Decisión 2015/495) y el coste derivado de su control constituye un futuro reto en los programas de control y seguimiento.