Desde que en 1875 se empezó a construir la línea R3 de RODALIES entre Vic y Barcelona y finalmente conectando esta línea R3 con Francia en 1929, ha sido una línea que ha proporcionado una gran conexión entre la parte norte y central de Cataluña, tanto para trenes comerciales como de viajeros. Hoy en día, esta línea transporta miles de personas al día a sus respectivos destinos pero con algunos inconvenientes. Parte del trazado de la línea puede antojarse anticuada y peligrosa, como lo es en el punto en el que nos situamos. En la sección del trazado que pasa por Mollet del Vallès, la línea ha creado una barrera física en la ciudad que hasta ahora ha tenido que ser esquivada para no entorpecer la evolución urbanística de la propia ciudad, lo cual no ha llevado a obtener una división entre el núcleo central de la ciudad y sud este de la ciudad, con toda la parte norte de la misma. Con el propósito de eliminar la separación entre las diferentes partes de la ciudad y los peligros que eso conlleva, se ha creado este proyecto.