La idea de Bolonia se implanta en las universidades del estado en un momento crítico de la economía mundial y esto crea grandes dificultades a la hora de llevarlo a la práctica pues la necesidad de recursos no es cubierta. Los docentes nos planteamos diferentes formas de cubrir el hueco administrativo que sean viables sin agotar tampoco los recursos humanos. Este artículo combina varias técnicas que permiten, en su unión, generar una clase dentro del sistema de Bolonia consiguiendo integrar la necesidad de cambio que exige el nuevo plan, es decir, la interacción entre los estudiantes y el profesor, la autonomía de aprendizaje, el trabajo en equipo,..….y no dejar de lado las clases magistrales para conseguir un resultado lo más óptimo posible.