Notas:
|
El aumento de la emigración que recibe España y, en particular, Cataluña,
especialmente desde la última década, ha situado este fenómeno en el centro de la
atención mediática, social y académica. Aunque se realizan numerosos estudios sobre el
impacto de los recién llegados en nuestra sociedad, a menudo no se tiene en cuenta lo
que sucede en las sociedades emisoras. Cada inmigrante tiene una razón personal para
trasladarse a otro lugar, pero en una escala superior cada país genera una serie de
circunstancias que provocan en sus habitantes el revulsivo para emprender la marcha al
extranjero en busca de un porvenir más halagüeño. Del continente africano, Senegal es
uno de los países que aportan a España un mayor número de inmigrantes (en tercer
lugar, por detrás de Marruecos y Argelia).
Siguiendo este fenómeno, son numerosos los investigadores/docentes que han
enfocado sus estudios en la evolución y los múltiples impactos de la inmigración en las
sociedades de acogida, obviando, en cierta manera, lo que sucede más allá y soslayando
la repercusión de estas migraciones en la sociedad rural de origen y de destino. |