Abstract:
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A raíz por un lado, de los descubrimientos de grandes deslizamientos ocurridos en diferentes islas
volcánicas, y por otro lado las observaciones efectuadas en la erupción de 1949 de la isla de La Palma, los
trabajos orientados al estudio de la estabilidad de esta isla han aumentado. La mayoría de estos trabajos se
centran en estudios geológicos, los cuales apuntan que una posible inestabilidad del flanco oeste de la isla
podría ocurrir. Algunos autores incluso han estudiado las consecuencias catastróficas, por ejemplo un
posible tsunami que llegaría a las costas de Florida, que podrían producirse si la inestabilidad se
desarrollase.
Los autores proponen a partir de las observaciones realizadas y de las escasas campañas geológicasgeotécnicas,
diferentes mecanismos de rotura, y diferentes causas externas, las cuales podrían ser las
precursoras del deslizamiento de la parte oeste de la isla. Alguna de estas causas podría ser la intrusión
magmática produciendo grandes tensiones en la isla, terremotos causados por la propia actividad
volcánica etc. Todos estos análisis tienen en general un carácter más cualitativo que cuantitativo.
Partiendo de todos estos estudios realizados, el presente trabajo intenta analizar el problema desde un
punto de vista más cuantitativo y geotécnico que los existentes hoy en día, analizando mediante diferentes
metodologías la posible inestabilidad de la isla de La Palma. Para realizar estos análisis se ha tenido que
efectuar muchas hipótesis y suposiciones, y por lo tanto los resultados obtenidos en el presente trabajo
están ligados a todas estas hipótesis.
Las metodologías que se han utilizado, han sido el método del equilibrio límite, el cual se ha realizado
utilizando el programa informático STABL, y el método de los elementos finitos, utilizando el programa
informático PLAXIS. El primero aporta una primera aproximación del análisis global de la rotura,
obteniendo diferentes mecanismos de rotura y el factor de seguridad asociado a cada uno de ellos. El
segundo de los métodos aporta, no sólo el análisis de la rotura en si obteniendo un factor se seguridad,
sino que proporciona una comprensión de cada una de las fases antes de estudiar la rotura. Este método
permite además resolver el problema tenso-deformacional del conjunto del problema. Esta última
metodología ha sido aplicada a varias geometrías, las cuales corresponden a diferentes interpretaciones
del propio problema, obteniendo así, un abanico de resultados.
Los resultados del MEL nos indican que las roturas con un factor de seguridad menor, y por lo tanto con
una probabilidad mayor a que se produzcan, son de tipología plana, pasando por la zona de las brechas
con unas características resistentes inferiores a la de las lavas. Estos dos materiales, lavas y brechas, son
los existentes en el perfil geológico simplificado estudiado. Las características resistentes de los
materiales, el tipo de rotura, así como la de la posición del nivel freático, son factores importantes, pero la
mayor influencia en cuanto al factor de seguridad, la encontramos en la consideración o no de terremoto.
Considerando este último, prácticamente todos los factores de seguridad se encuentran por debajo de la
unidad, mientras sin considerar esta hipótesis los factores de seguridad son superiores a la unidad.
Los resultados en MEF nos muestra la evolución de las tensiones en frente a diferentes sucesos, como por
ejemplo, el de una intrusión magmática. Este método muestra como las deformaciones de corte se
concentran en la capa de las brechas. De esta manera el análisis de la rotura indica una rotura a través de
ellas. En función de las diferentes geometrías adoptadas (análisis de toda o la media isla) y las
condiciones de contorno, obtenemos algunos matizos en los resultados. De esta manera, el factor de
seguridad obtenido para un análisis completo de la isla es de 1.6 con una rotura superficial de la ladera
oeste, mientras que en el análisis de media isla es prácticamente igual a la unidad, con una rotura que
transcurre entre las brechas.
.Simplificando las conclusiones y resultados, podemos constatar que la rotura de la isla de la Palma,
entendiendo esta como un mecanismo gigantesco involucrando cientos de km3 como apuntan los
especialistas, necesita de un terremoto para que se produzca. |