Abstract:
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La buena noticia para las empresas desde que apareció Internet, es que los negocios son
mucho más visibles y están más al alcance de cualquiera. Puede ser que los usuarios
estén a un click de conocer nuestra oferta y nosotros, a un click de hacer negocio. Pero
también es verdad, que estamos a click del fracaso y los usuarios insatisfechos estarán a
un click de la competencia.
Mientras navegamos por Internet, diariamente nos encontramos con páginas que no se
cargan, enlaces que no funcionan, incompatibilidad entre navegadores, transacciones
que no se realizan... Si hacemos un repaso por los comentarios que realizamos al
encontrarlas, todos son negativos.
El desarrollo y despliegue de una solución Internet tiene que ser cada vez más rápido.
Sin embargo, los profesionales se enfrentan a un problema: una mezcla de complejas
tecnologías relativamente nuevas, que evolucionan continuamente, la carencia de
profesionales expertos en toda la cadena de producción multiplica los riesgos de fallo.
Como consecuencia, cada día se publican más sitios Web sin haber sido suficientemente
probados o sin saber la carga que podrán aguantar. No hay nada peor que navegar por
páginas que no funcionan bien.
Por este motivo debemos poner remedio con el fin de obtener una aplicación de calidad
y, la primera señal de calidad de un sistema es demostrar que cumple sus objetivos para
los que ha sido diseñada. La lista de errores que pueden dañar irremediablemente un
negocio e imagen es larga y debe evitarse.
Por este motivo necesitamos realizar pruebas, necesitamos aplicar TESTING. |