Las necesidades en todo ámbito cambian constantemente y cada vez de forma más acelerada, por ello las organizaciones presentan mayor inclinación a contar con áreas especializadas en el desarrollo de soluciones a problemas actuales y futuros, o buscan vincularse a organizaciones dedicadas exclusivamente a innovar. Los centros de I+D se enfocan en mejorar las características de productos o servicios con aplicabilidad práctica, donde el grado de novedad puede ser un factor importante en los ingresos de la organización. Para fortalecer la innovación, las organizaciones deben fomentar la creación de conocimientos y por ello, es necesario que se comparta este recurso, para impulsar la exploración de nuevos conocimientos entre los individuos, a partir de la combinación de los existentes, asegurarse que sean distribuidos y se encuentren disponibles, por ello las organizaciones deben impulsar las condiciones para que el proceso de compartir y transferir conocimiento se efectúe de forma fluida, ya que, si las organizaciones no son conscientes de cómo se encuentra este proceso en el seno de sus actividades diarias, la creación de este recurso valioso se verá limitada, lujo que no se puede dar un centro de I+D, pues la creación de conocimiento es la base de sus procesos de operación. El objetivo del presente estudio es diagnosticar el proceso de compartir y transferir conocimiento, para estimular la creación de nuevo conocimiento en un centro de I+D. Para ello se aplica una herramienta para identificar actividades habilitadoras o barreras presentes en el proceso de compartir conocimiento, con el fin de proponer estrategias que ayuden a mejorar los flujos de creación y aplicación de conocimientos en este tipo de organizaciones.

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