La introducción de nuevas tecnologías en los museos es necesaria e imprescindible para su modernización. Es importante verificar previamente que éstas permitirán obtener o ampliar la rendibilidad científica y cultural del museo (Metallo & Rossi, 2011). La tecnología 3D facilitaría a investigadores el estudio de material virtual. Esta tecnología acercaría las colecciones y las exposiciones a colectivos de visitantes virtuales. Permitiría por ello aumentar las posibilidades expositivas. En algunos ámbitos como la paleontología, las impresiones 3D ya son una realidad. Por lo que en el futuro se podrá disponer de réplicas de ejemplares de museos que permitan una manipulación científica o lúdica de los especímenes de las colecciones científicas. Para que una colección de modelos 3D sea apta a la investigación científica es imprescindible comprobar que tiene como mínimo la misma utilidad que la colección original. Por ello se tomaron medidas craneales en Atelerix algirus (LEREBOULLET, 1842), en originales, i en modelos virtuales. Para cuantificar estadísticamente la consistencia entre mediciones equivalentes tomadas sobre cualquier tipo de elemento es común utilizar la repetibilidad (Senar, 1999; Quesada & Senar, 2006). Este trabajo muestra la integración de los modelos 3D en las colecciones, y testa y analiza la capacidad de repetibilidad en la toma de mediciones de los modelos tridimensionales.